Son muchas las personas que buscan productos limpiadores que sean muy eficaces para la limpieza del rostro y aunque existen muchos en el mercado, no hay nada para una profunda limpieza como un producto con micelas. ¿Y qué son las micelas? Pues ahora vamos a explicártelo para que tengas un concepto claro de cómo actúan estas partículas sobre la piel y qué productos pueden contenerlas.
¿Qué son las micelas?
Me gustaría explicar el concepto de micela de la manera más sencilla posible para que todo el mundo lo entienda, así que trataré de usar lo menos posible un lenguaje técnico dentro de lo que cabe.
Las micelas son estructuras esféricas formadas por moléculas formando dos regiones, la región hidrofílica con una cabeza polar y otra región hidrofóbica con una cola apolar. ¿Y qué quiere decir esto? Pues algo tan sencillo como que estas partículas atraen tanto el agua como el aceite. Por eso es apreciado tanto en limpiezas de cutis, por su alta capacidad para eliminar suciedad en profundidad.
¿Para qué sirven las micelas?
Volvemos a repetir su alta capacidad para atrapar por parte de la cabeza polar restos de suciedad y por parte de la cola apolar atrapar la grasa existente. Es mágico, todas las partículas de suciedad, de sebo, de maquillaje o de contaminación de la atmósfera son atraídos como un imán por parte de las dos regiones y además sin tener que frotar fuertemente y alojándolo en el interior de la micela.
Además, una de las virtudes de estas micelas es que se pueden aplicar sobre cualquier tipo de piel, es indiferente, para pieles secas o grasas incluso para pieles sensibles. No produce en ningún momento agresividad o sequedad en la piel y respeta su ph.
Conclusión
Los productos con micelas son los limpiadores por excelencia. No tenemos que dudar al respecto, pero no quiere decir que necesariamente debamos usar solamente estos principios activos o mejor dicho este ingrediente. Sería muy bueno usar otros en particular como jabones naturales y complementar el proceso con otros productos para nutrir, hidratar y tonificar nuestra piel facial.
