Por norma todos nosotros ingerimos multitud de alimentos día tras día y a veces algunos de estos alimentos no nos sientan bien, no son saludables para nuestra salud. Ni siquiera nos lo podemos imaginar, a veces son realmente dañinos y no nos damos cuenta. Estos alimentos pueden ser el resultado de múltiples factores que alteran nuestro organismo, desequilibran nuestra glucosa e inducen a alguna enfermedad. Los vamos a llamar alimentos agresores y vamos a ver cómo descubrirlos.
¿Qué es un alimento agresor?
Un alimento agresor es un alimento habitual en nuestra dieta que altera nuestra glucosa causándonos diversos problemas de salud. A veces no se manifiesta con molestias o dolores y hace que sea imperceptible a nuestros sentidos.
¿Qué alimentos pueden ser agresores?
No hace falta decir que el azúcar, los carbohidratos refinados y otro sin fin de alimentos no debería formar parte de nuestra dieta o hacerlo de una forma controlada. Estos alimentos son muy propensos a desequilibrar nuestra salud, pero cualquier alimento puede hacerlo.
Existe una forma de localizar un alimento agresor de una forma rápida y segura y voy a pasar a explicároslo.
¿Cómo detectar estos alimentos?
La mejor forma para detectar estos alimentos es usar un glucómetro. El promedio de los niveles de azúcar en sangre de una persona sana vienen siendo de entre 80 y 90 mg/dl. Se debe realizar el test antes de comer, apuntar el resultado, apuntar los alimentos que se han añadido en esa comida y al cabo de dos horas repetir el proceso de medición de glucosa en sangre. Si los resultados obtenidos en esta segunda ocasión fuesen inferiores a 100/120 mg/dl todo estaría correcto en un principio, pero si pasa de unos 130/140 mg/dl hay que sospechar de un ingrediente agresor en esta última comida. Si esto lo repetimos durante un tiempo determinado podemos averiguar por descarte cual ha o han sido los alimentos que nos han causado este desajuste de glucosa.
¿Qué conseguimos con esta medición?
Al suprimir este o estos alimentos conseguiremos revertir multitud de enfermedades que nos acechan sin nosotros ser consciente de ello. Problemas como depresión, diabetes tipo 2, obesidad, abdomen hinchado, problemas de sueño, afecciones de piel, cándidas, verrugas, tiroides, etc.
Vemos lo fácil y lo efectivo que resulta este método. Tan solo es localizar el alimento agresor y suprimirlo de nuestra dieta, ¡est voilà!
Para empezar, es un poco absurdo que diga que la glucosa de una persona sana Dos horas después es hasta 120, y que el de una semana persona que ha tomado un alimento agresor es a partir de 130. La franja entre 120 y 130 es territorio comanche no? Ni bueno ni malo😅